Vierte un chorro de agua a lado de uno de aceite sobre una superficie irregular.
¿Crees que se lleguen a juntar? Claro que la respuesta es incierta. Y las posibilidades de que sucedan son grandes. ¿Pero que mas da? Estas corriendo un riesgo como todo, ¿no?
Hoy hice un experimento parecido: Asumí que una vez mas que iba a poder con todo. ¿Y adivina que? Los chorros sí se juntaron.
Cargar esas malas experiencias en ese bolsillo imaginario del que hablábamos y guardarlas por un breve momento de cordura fue mi reto.
Mi cena de noche buena la viví de la peor manera en mi vida. Estuve manteniendo la compostura, mientras trataba de alejarme una noche mas de esos pensamientos que me han atormentado recientemente, pero no me fue posible. Lamento mucho haber arruinado la velada para los demás, pero esto no se trata de ellos, ¿cierto?
No pude contenerlo. Con mi mejor maquillaje en meses, el cabello bien planchado y las pestañas bien puestas, me propuse dar mi mejor cara.
Se que empecé tarde, pero mi terapia blogger anterior me era muy atractiva , entonces que decidí terminarlo hasta donde me sintiera cómoda y satisfecha. Y así lo hice. Al terminar me propuse arreglarme y jugar al juego de las sonrisas.
Mi hermana me estaba apurando. Eran las 7:00 pm ¿en serio? ¿Que tanta hambre podrías tener? Pero esto no se trataba de ella o de la hora exacta para convivir según el diario del buen comer, versión Noche Buena. Esto se trataba de no dejar a sus marido esperando con hambre, o a mi padre quejándose de que quería comer. Y me molesta tanto ¿sabes? ¿Porque darle prioridad a algo así?, cuando de por medio esta la estabilidad mental y emocional de una persona que no está bien.
Pero el maquillaje es terapéutico para mi tambien, tomar cada sombra cual lienzo con una forma abstracta con oleo. Cuando me maquillo soy yo y las tonalidades de mi.
Sin embargo cada que pueden me piden ser aquella que les apoya en este tipo de cosas. "Es que a mi no queda el pelo como a ti..- Es que tu si sabes pintarte, a ver, que sombra me pondrías? - Igual y es que el delineado no se te va para abajo, apenas que me enseñes.." Y no es problema, al menos no lo era.
Todos esos comentarios infiriendo si no bien una solicitud de ayuda indirecta, una semejanza a un mensaje al aire, que aclara que tu ayuda es bien recibida, si lo das.
¿Y porque no hacerlo? No necesito que me lo digan directamente, me agrada que me hagan sentir que soy buena en algo.
Pero una vez que es "por costumbre" que la hermanita menor "arregle" a la sobrina porque "solo ella sabe peinar", se establece que ya no solo tengo la responsabilidad de hacer algo que quiero y puedo hacer por mi, en una noche especial, si no tambien, tengo que hacerlo para alguien mas, en tiempo y forma.
¡Pero si por eso he acordado no ser madre aun! Llámenme egoísta ( y estoy acostumbrada) sin embargo, esta es mi noche buena tambien. Y esos incesantes mensajes de "¿a que hora puedes?" y "¿cómo vas?" se vuelven agotadores.
Y no pensamos en decir que no, sin embargo, ¿porque tengo que preocuparme yo si el peinado de tu hija queda o no queda a la hora que lo necesitas? Yo tambien quiero verme bien, para eso había venido en primer, después de todo, ¿no?
Pero fue en declive.
Después de haber acordado que cada lado de la familia llevaría algo distinto para cenar y así compartir, mi maravillosa idea de cocinar pechugas rellenas (por mi parte), dicha idea se vio frustrada por no tener la cocina disponible en la mañana por el problema mencionado anteriormente con mi madre.
Por lo cual, asumí sin problema alguno que después de bajar ya lista para convivir, podría cocinarlas y tenerlas listas para compartir en la cena, sin embargo me encontré así: Acortando mi tiempo para realizar un peinado apropiadamente que me pidieron nuevamente, de ultimo momento y que me sentí comprometida a no rechazar, con el temor de no tener otro conflicto con alguien mas en la casa.
¿Te imaginas el tormento?
Una vez, finalizada con mi sobrina, bajamos juntas a la cocina y para mi sorpresa/no tan sorpresiva, al empezar a freír mi parte de la cena todos empezaron a cenar sin mi.
Se que fui demasiado modesta cuando le había contestado previamente a mi hermana por mensaje que si quería que tuviera a la niña lista, no se preocupara y antes de terminar yo con mi maquillaje la peinaba y empezaran a cenar sin mi. ¡PERO VAYA QUE LO TOMÓ LITERAL!
Justamente no pensé que fuera a tomarme la palabra. Sin embargo esta cereza en mi pastel emocional no podría faltar. Ahi fue donde todo mi plan se vino abajo.
Ahí me encontraba yo, vestida en mis mejores trapos, con el mejor maquillaje y el peinado cuidadosamente arreglado, adornado de mi perfume favorito, cocinando 3 pechugas congeladas para compartir para gente que ya se encontraba agraciadamente en la mesa, sirviéndose lo demás, hablando como si no estuviera ahi. ¿Y saben que? siento que de cierta manera no lo estaba.
Yo era una materia gris, cocinando mas materia gris cuando todo lo que quería era llorar y tirarme a reclamar al mundo todo lo que me ha pasado este año.
NO TENGO NADA DE QUE ESTAR AGRADECIDA. Perdí mi orgullo, perdí mi felicidad, perdí a mi adorado perro, perdí mi estabilidad emocional e independencia financiera. Perdí el valor que tenía de mi misma, se fue, ya no está.
Estoy enojada conmigo por no poder cambiar a la altura de la mitad de mi vida y darme cuenta que no soy la mitad de la mujer que esperaba ser cuando era niña. ¿ Y sabes que era lo peor? QUE A NADIE MAS LE IMPORTABA. Ahi estaba yo con un sartén y 3 piezas de pollo que no me iban a saber a nada, con gente que iba a pensar que todo estaba bien una vez que me sentara con ellos, y que iba a ser solo una navidad más.
Se que todos estamos sufriendo por nuestros propios problemas, pero de nuevo: esto no se trata de ellos, ¿no es así? No me voy a preguntar porque ellos no están en una habitación oscura, con 30 pedazos de papel de rollo con secreciones nasales en el piso, escribiendo sobre sus dolencias. Cada quien vive sus lutos a como puede y se que yo estoy viviendo los míos, a como pude.
No quise intentarlo mas, aproveché un momento en donde iban a volverse a servir nuevamente porciones de su cena o alguna ración y apagué la estufa y corrí con mi celular hacia las escaleras. Me encerré y solo quería irme de aquí. Quiero ir con mis gatas, quiero llorar a gusto sin que nadie me juzgue o me tenga lástima. No quiero ser el show de nadie y no pretendo arruinarle la noche a nadie,
YO - solo - me - quiero - ir.
No pasó mucho hasta que escuché unos leves toquidos a la puerta. Gracias a Dios recordé cerrar con seguro. Recuerdo que no quería soltar mi llanto. Hablé con la voz mas estable que pude y pude alcanzar a decir un par de veces "quiero estar sola, no quiero hablar".
Y dije la verdad. Sabia que nadie iba a entender lo que siento y/o el porque lo estaba proyectando en ese momento. Este año ha sido horrible por esto y algunos otras factores que después te contaré pero ya no pude contenerlo mas.
Después de oír que, quien sea que haya subido, volvió a la planta baja, junté mis cosas en mis bolsas: mi secadora del pelo, mis productos de belleza, mis productos de aseo personal. Solo quería escapar en ese momento. Pero al hacerlo sabía que no quería hacer otra escena, por mas que me doliera. Y manejar el largo y peligroso trayecto a casa no iba a ser algo que dejaría tranquilo a nadie.
Me limité por juntar todas mis cosas en bolsas en un rincón de la cama, cual viajero en el aeropuerto, esperando un vuelo que lo lleve a casa, y decidí que lo mejor era calmarme y ponerme cómoda.
Decidí ponerme mi pijama nuevamente y hacerme una coleta con mi pelo cuidadosamente planchado. ¿Qué mas daba? La charada ya había fracasado y no había razón para mantenerme arreglada, después de todo no iba a poder salir de aquí.
Luego, aun entre lagrimas y sollozos contenidos me nacieron muchas ganas de fumar nuevamente. Necesitaba esa bocanada de humo, algo que me acompañara en mi soledad por el momento. Pedi a mi hermana que después de que terminara de cenar, me subiera los cigarros que había dejado en la sala, y así lo hizo. Después de unos minutos tocó cuidadosamente a mi puerta a entregármelos, sin antes no darme una mirada preocupada que, aunque no la vi directamente, la pude sentir sin problema.
Aproveché para abrir la ruidosa puerta que alarma a toda la casa cuando alguien la abre o cierra, para salir al techo del porche, el cual es lo único de esta casa que puedo apreciar, si lo puedo decir así.
Ese techo alguna vez lo usé para llorar en silencio en una de mis pocas visitas a esta casa, así como uno de mis intentos fallidos de conectar con mi madre y armar un plan de paz donde ya no peleáramos.
Y por fin lo sentí. Una bocanada de aire fresco después de ese estrés emocional. Miré las pocas estrellas que puedo desde ahi, y sentí el fresco viento de este Diciembre en ese municipio alejado de la ciudad.
Encendí mi cigarro y pude disfrutar el humo mitigando mi ansiedad. No estoy orgullosa de ser fumadora activa, de hecho lo trate de dejar hace unas semanas, y así lo hice (por 1 semana y media), pero no fue hasta que recibí ese mensaje de rechazo de postulación laboral a ese puesto que tanto anhelaba tener que sentí que no pude sola y manejé tan rápido me fue posible a la tienda de conveniencia mas cercana para comprar nuevamente un nuevo paquete. Otro fracaso, pero ¿que mas da? si ahora me ayuda a sobrellevar todo lo demás. Sé que solo necesito apoyar una pierna nuevamente, solo una pierna y se que lo demás vendrá mas fácil, y solo necesitaré de un pequeño esfuerzo. Pero hoy no fue el día y no se cuando llegará.
No supe cuanto tiempo transcurrió sobre ese porche, viendo al horizonte y escuchando tronidos de los molestos fuegos artificiales que la gente aun no se resigna a dejar de comprar, cuando recordé que tenía el celular conmigo y decidí ver si tenía algo interesante que ver o por lo menos la hora. Y vi un mensaje de mi hermana "Vente a cenar. Y luego jugar con nosotros." "Aquí me siento contigo". Ese último mensaje me reconfortó mas de lo que debió. Porque sé que no se refería a lo que yo quería que se refiriera. Necesitaba a alguien que se sentara a mi lado en ese porche. Sin hablar, sin abrazos sin preguntar ni juzgar nada. Por lo cual ingenuamente decidí dar una oportunidad a esa cercanía y contesté con un "mejor ven y siéntate tu aquí" "No quiero hablar pero no me siento bien"
Acto seguido ella sube y con una voz ligera me preguntó a travez de la ventana que qué hacía yo ahí.
Yo no dejaba de llorar mientras veía al horizonte aún.
Uno sabe que esta llorando por algo de gran calibre cuando las lagrimas solo brotan sin que fuerces absolutamente nada, es algo tan curioso, como si tu alma las empujara por tus ojos. Tambien tu mirada se pierde en cualquier cosa y tu respiración es tan corta que apenas y estás respirando, estas en shock emocional, estas perdida por dentro.
Mi hermana cruzó la gran ventana y se sentó a mi lado. Por dos minutos tuve paz. Eso era lo que yo quería. Sin embargo rápidamente nuestro silencio se ocupo de un par de preguntas de preocupación. "¿No tienes frio? ¿No tienes hambre? ¿Porque ya no bajaste?" Le contesté dentro de mi shock que no, que yo solo quería llorar y no quería hablar.
Ahora, PAUSA AQUÍ. Para poder contar y entender la siguiente parte es importante explicar algo muy complejo.
Mi hermana es el ser mas cercano y parecido a mi que conozco. Y eso que somos muy distintas. Como lo mencioné antes, nos llevamos 6 años de diferencia y eso a veces causaba inconvenientes dentro de nuestra convivencia pero nada fuera de lo soportable.
Cuando recién nos mudamos a esta casa, mi hermana a los pocos meses me confesó en secreto que había quedado embarazada y que su entonces novio (ahora pareja) habían decidido tenerlo. Ese momento creo que fue un parte aguas de como todo se vino abajo. Ella poco después dejó este inestable nido, dejándome sola con unos padres en un matrimonio disfuncional. Su relación con su pareja siempre me ha parecido un misterio. Han habido tantas situaciones que durante años nos a compartido a mi madre y a mí que nos han levantado por un largo periodo de tiempo, un repudio muy fuerte hacia el. Pero, ¡que difícil es cuando hay niños de por medio!
Desconozco con exactitud que ha sucedido en su relación, pero se que ella se ha mantenido feliz y vaya que muy enamorada. No se si trata de mi incredulidad al amor o la de su ingenuidad sobre la misma, pero si puedo decirlo, admiro como ella ama a ese personaje. Creo que únicamente he amado así una vez y sí que fue hermoso.
Así como recuerdo verlo a ese ex novio, así veo que mi hermana ve a su pareja. No le puede quitar las manos de encima. No deja de hablar de él. Es su máximo. Y lo que coraje me da es que sé que el lo sabe. Y digo coraje porque estoy segura que en mas de una ocasión lo ha usado a su beneficio.
El, siendo hijo mayor de 3 hermanos, el orgullo de su mamá, y por lo tanto la figura que "nadie llegará a ser suficientemente bueno para el" con un mover de dedos (sentido figurado) convence a mi hermana de que el cielo es verde y las ranas cruzan el mar con un solo brinco. Se que muchos hombres aspiran a tener a alguien así, que les crea todo. Solo espero que el desgraciado valore un pelo de lo que tiene a su lado.
Entonces, esto es relevante en la historia porque:
Sobre ese porche sabía que mi hermana moría por bajar y estar con él. No dejaba de ver el celular, y estoy segura que su apuro por comer temprano era porque el señor ya tenía hambre. Pero en fin, una vez que le di mi sobria contestación, comentó algo sobre si no me molestaban los zancudos (rascándose los chamorros con exageración) y se limitó a pararse y decir algo sobre "pues si quieres bajar a jugar ahi vamos a estar". Se sacudió el trasero con las manos y cruzó nuevamente ese ventanal hacia dentro de la casa y se fue.
Fue tan rápido y repentino que no supe si lo que había pasado había sido real.
Estaba pidiendo compañía y me dejaron por zancudos que no había ahí (dado a que hacia menos de 12 grados y había viento sobre ese porche, sin mencionar que obviamente ambas teníamos frio.) ¿ZANCUDOS DE DONDE? ¿Porque la gente miente? ¿Porque retan nuestra inteligencia inventándose cosas que no hacen sentido? Si querías ir con tu amado, sólo dilo y afronta que es mas importante jugar un estúpido videojuego que puedes jugar con el cuando te de la gana a dar animo a tu hermana que obviamente esta teniendo una crisis emocional.
No hay nada nuevo allá abajo. NADA. Padres que se van a acostar temprano, una niña que juega lo que sea que le pongas enfrente y tu marido. AMBOS viven contigo, ¿porqué es mas importante eso? Te estoy diciendo que te necesito, te estoy llorando y preguntando ¿que hice mal?
Casi nunca nos vemos, nunca te he confesado todo esto y cuando lo hice me sentí la persona mas egoísta del mundo, al privarte de algo que ya tienes en casa, de arruinar tu navidad. De pedirte unos minutos de tu compañía en ese frio porche.
Pero ahora veo, que entonces esto no se trata de mi, ¿verdad?
Ya me quiero ir, me siento tan sola en este lugar, no pertenezco aquí. Y deseo pertenecer. Pedi por alguien hoy antes de entrar a la casa nuevamente. Pedi por alguien que llegara a mi vida y me hiciera sentir genuinamente querida. Que no dude para dar un abrazo cuando obviamente necesito uno. Que no le cueste decir que me quiera y que puedo contar con esa persona para lo que sea. Ya sea que esté a mi lado mientras lloro o solo escuche atentamente sin dar una opinion.
Busco tanto el cariño y me duele tanto cuando lo doy a cuanta persona se me encuentre enfrente y noto visiblemente que no lo valora, que me mienten para evitarme, que olvidan regresar una llamada o un mensaje, que digan que están ahi para mi cuando, en mis momentos de gran desesperación me ignoran. Quiero a alguien genuino, de gran calidad y bondadoso que me haga sentir que no soy el bulto en el que me estoy convirtiendo.
Tengo mucho miedo y me siento tan sola
- Annie_Kat
Bonus:
Escucho risas y juegos en la planta baja, me tranquiliza no haberle arruinado la navidad a nadie.
